La precisión y poder de penetración del topo GRUNDOMAT, incluso en terrenos pedregosos lo hacen ideal para la construcción subterránea rápida y económica de conexiones domiciliarias. La precisión y poder de penetración del topo GRUNDOMAT, incluso en terrenos pedregosos lo hacen ideal para la construcción subterránea rápida y económica de conexiones domiciliarias. (Foto: Tracto-Technik)

La alemana Tracto-Technik, cuya sede central está en Lennestadt-Saalhausen, desarrolla, produce y comercializa máquinas y accesorios para tendido y renovación subterránea de tuberías. Una tecnología de perforación sin zanjas que de acuerdo con la empresa ahorra recursos y es sostenible. Mauricio López Vargas, quien recientemente ha asumido como country manager South America para la empresa, explica que los equipos ofrecen una amplia versatilidad y “se utilizan en la construcción de infraestructura de tuberías para agua, gas, energía, telecomunicación, electromovilidad y calefacción distrital, para redes de fibra óptica, en gasoductos, como también en saneamiento”.

Celebrando este año su 60vo aniversario, Tracto ha desarrollado numerosas e innovadoras soluciones NoDig y cuenta con representantes en toda Alemania y empresas asociadas en Suiza, Inglaterra, Francia, Australia, África y Estados Unidos, y ahora está abriéndose espacio en el mercado latinoamericano.

Zanjando presencia en Sudamérica

La compañía ha estado operando en el último tiempo en un proyecto de agua potable en Cochabamba, Bolivia. “La red de agua potable del centro de la ciudad necesitaba una renovación y los equipos de Tracto, específicamente el topo Grundomat, ha contribuido a mejorar el suministro de agua potable, caracterizado por la escasez de agua y un sistema de tuberías deteriorado. En el marco de la rehabilitación de la red de agua potable del centro de la ciudad, el topo se utilizó para construir 1.000 conexiones domiciliarias en las vías densamente edificadas”, explica López.

El topo en acción en la Avenida Ayacucho, en el centro de la ciudad boliviana de Cochabamba. Allí se realizaron un total de 1.000 conexiones domiciliarias de agua mediante un método sin zanja. El topo en acción en la Avenida Ayacucho, en el centro de la ciudad boliviana de Cochabamba. Allí se realizaron un total de 1.000 conexiones domiciliarias de agua mediante un método sin zanja. (Foto: Tracto-Technik)

Con cerca de 631.000 habitantes, Cochabamba es la cuarta ciudad más grande de Bolivia, capital del departamento con el mismo nombre. Es una ciudad antigua con numerosas ruinas de la época preincaica e incaica, situada en los Andes orientales, a 2.560 m.s.n.m. Cochabamba apareció en los titulares internacionales a principios del milenio, cuando los ciudadanos lucharon con éxito contra la privatización del suministro de agua potable en la denominada ‘guerra del agua’.

“Desde entonces, el suministro de agua es relativamente seguro, al menos en el norte de la ciudad, que lleva el sobrenombre de ‘Ciudad Jardín’ por sus numerosos parques y jardines. En el sur de Cochabamba, sin embargo, sigue habiendo escasez de agua porque las tuberías aún no llegan allí”, comenta el ejecutivo.

Es en este contexto que la empresa municipal Servicio Municipal de Agua Potable y Alcantarillado (SEMAPA) está abordando gradualmente la tarea de ir mejorando las conexiones y suministro de agua en el centro de la ciudad. Para ello, se renovó por completo la deteriorada red de agua potable del distrito 10, lo que requirió también la construcción de nuevas conexiones domiciliarias.

Conexiones sin zanja

La anticuada red de agua potable del distrito 10 tiene 33 kilómetros de longitud y se renovó por completo en el curso de la rehabilitación. No solo se debían renovar las redes de agua potable, sino también un total de 2.758 conexiones domiciliarias, que debían ser construidas nuevamente. Los desafíos no eran menores, trabajando en zonas urbanas y con sectores donde las vías son relativamente estrechas y una urbanización es densa, se necesitaban equipos que pudiesen hacer el trabajo rápida y eficientemente y con el menor impacto posible para la población y el medioambiente.

“SEMAPA actuó aquí con bastante profesionalidad y decidió construir cerca de 1.000 conexiones domiciliarias en este tramo de la Avenida Ayacucho, sin zanjas, para ser más precisos, mediante el método de desplazamiento de suelo con el topo Grundomat. Para ello, SEMAPA contrató a la empresa Sur Energy S.R.L. & Asociados, que tiene la experiencia necesaria en la construcción sin zanja. La empresa alquiló las máquinas de Plastiforte, representantes de Tracto para Bolivia”, comenta López.

¿Cómo trabajan los equipos?
Una vez colocado el topo en la zanja de inicio, se alinea con precisión con el objetivo mediante una mira óptica de orientación. Una vez colocado el topo en la zanja de inicio, se alinea con precisión con el objetivo mediante una mira óptica de orientación. (Foto: Tracto-Technik)

Los topos Grundomat ofrecen una propulsión de dos tiempos y una cabeza móvil que garantiza precisión y poder de penetración, incluso en terrenos pedregosos. Esto hace que el topo sea ideal para la construcción subterránea de conexiones domiciliarias de forma rápida y económica. “Los responsables decidieron utilizar el modelo 45 de la nueva generación, equipado con cabeza escalonada para su aplicación universal en todos los suelos desplazables. Las longitudes de las conexiones domiciliarias a instalarse, hablando de la longitud de perforación, eran distintas, entre siete y 10 metros de largo, esto por motivos de la ubicación y separación entre las casas y la matriz principal de agua potable”, explica.

Luego de la excavación de las pequeñas zanjas de inicio y destino (cada una en un lado de la vía) y de alinear la máquina con el objetivo, el Grundomat 45 de accionamiento neumático se abrió paso a lo largo del trazado bajo la vía a una profundidad de alrededor de 0,6 metros con un alto grado de precisión, un funcionamiento estable, fiable y efectivo, de acuerdo con el ejecutivo. “El subsuelo conformado por arcilla con un componente arenoso, y los ocasionales niveles de agua subterránea no causaron ningún problema para la perforación, la tierra se desplazó diametralmente paso a paso sin ningún problema. Incluso las tuberías viejas de agua potable y alcantarillado, así como las de comunicación y de gas, pueden ser cruzadas sin sufrir daños”, agrega.

El tiempo de instalación por conexión domiciliaria fue de 1 a 1,5 horas en cada caso, la velocidad de perforación fue de 5 a 7 m/h. Las nuevas tuberías de agua potable de HDPE con diámetro de 25 a 32 mm para la respectiva conexión domiciliaria se introdujeron durante una segunda etapa de trabajo.

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