Bachelet consolida su inversión en infraestructura

La presidente de Chile, Michelle Bachelet, ha anunciado esta semana la consolidación de sus planes de inversión en infraestructura. De acuerdo con la mandataria, su gobierno comprometerá recursos equivalentes a US$ 18.000 millones en distintas obras públicas hasta el año 2021 y firmará concesiones de otras obras por el valor potencial de US$ 9.900 millones hasta el año 2020, lo que según la presidente supone aumentar la inversión chilena en infraestructura de los 2,5% actuales hacia un 3,5% del PIB del país.

Entre las concesiones que forman parte del plan 2014-2020, se incluyen la expansión del aeropuerto internacional de Santiago, por US$ 655 millones, cuyas obras se encuentran en progreso. Además, la autopista Costanera Central, que supone inversiones de US$ 1.980 millones, y la licitación final del anillo vial Américo Vespucio Oriente, están previstas.

El plan de inversiones puramente públicas comprende, de acuerdo a la presidente de Chile, una cartera de proyectos regionales que tienen la motivación de acercar el estándar de infraestructura de las demás regiones del país a la zona central donde está la capital Santiago.

En este sentido, el plan incorpora como objetivos una iniciativa de Conectividad Austral, con US$ 1.976 millones previstos, y el Plan Arica Parinacota, región al norte del país, que tendrá una inversión de US$ 732 millones. Dos planes de construcción de embalses fueron anunciados: uno de ellos prevé la construcción de siete grandes embalses y recibirá US$ 2.370 millones, mientras que el otro prevé la construcción de 15 pequeños embalses y tendrá verba de US$ 515 millones.

Energía y salud

En las fuentes oficiales de información del gobierno de Chile, el plan se desglosa sin menciones a proyectos de generación de energía o de infraestructura de salud, dos puntos en que ha habido polémica desde que Michelle Bachelet tomó posesión de la Presidencia en marzo.

Pese las dramáticas necesidades de más electricidad en Chile, el megaproyecto de generación de hidroelectricidad Hidroaysén, que se ubicaría en una región de la Patagonia chilena, fue cancelado por el gobierno.

Por su parte, el programa de concesiones hospitalarias lanzado por el gobierno anterior antes del término de su período está bajo fuerte cuestionamiento, toda vez que estudios realizados por el equipo de Bachelet encontraron que el modelo de concesiones no sería el más adecuado para realizar dichas inversiones.

Este plan se cambió por otro que se anunció recién, que prevé la construcción de hospitales públicos en Chile sin intervención operacional privada, o sea, por obra puramente pública.