Brasil a la cabeza de descarbonización de los combustibles
16 September 2022
El CCEE anunció que su propuesta de crear un grupo de trabajo centrado en la certificación de la energía que se utilizará en la producción de hidrógeno renovable fue aprobada por el Comité Internacional de Producción y Transmisión de Electricidad (Cigre), la mayor comunidad mundial del sector. Con ello, Brasil coordinará la creación de parámetros globales para la descarbonización del combustible.
La Cámara debatirá, ahora a nivel internacional, qué atributos se considerarán para definir el hidrógeno como renovable y cuáles son los criterios mínimos a tener en cuenta en una certificación de este producto. El trabajo se llevará a cabo junto con miembros de otros países interesados.
“Este es un paso importante para situarnos a la vanguardia de este nuevo mercado. Seremos, sin duda, uno de los mayores exportadores de este insumo en el mundo, actuando como un actor clave en la aceleración de la transición energética del planeta”, dijo Rui Altieri, Presidente del Consejo de Administración de la CCEE.
La entidad también pretende lanzar, todavía este año, un modelo de certificación simplificado para atender los proyectos brasileños que ya están en marcha y trabajará para crear una versión definitiva para 2023.
Un estudio de la consultora McKinsey afirma que el hidrógeno debería crear oportunidades de inversión de unos US$200.000 millones en 20 años en el país. El mercado nacional representa la mayor parte de este nuevo segmento, con unos ingresos de hasta US$12.000 millones en 2040, impulsados por los sectores del transporte y el acero.
Con la ventaja en el coste competitivo, se calcula que unos US$6.000 millones pueden proceder de las exportaciones, especialmente a Europa y Estados Unidos.