Brasil reanuda su obra pública más cara

El gobierno de Brasil ha reanudado los trabajos en una de las más grandes e costosas obras públicas de la historia del país: la canalización del río Sao Francisco. El proyecto de llevar aguas de este río a todos los estados de la región Noreste, la más árida del país, estuvo los últimos años paralizado debido a una variedad de problemas contractuales con constructoras e imperfecciones de los proyectos de ingeniería.

Las obras de canalización empezaron en el año 2007. El ambicioso proyecto (que además es discutido en Brasil desde hace más de un siglo como solución para la sequía tradicional del Noreste), prevé la construcción de dos canales que salen del Sao Francisco. El eje Norte tiene extensión de 402 kilómetros, mientras el eje Este tiene 220 kilómetros, lo que resulta en una obra de 622 kilómetros de canales.

Todo el trabajo estuvo paralizados los últimos dos años para una revisión casi total de los contratos, lo que exigió del gobierno un esfuerzo inmenso y elevó los costos del proyecto de los iniciales US$ 2.120 millones (aproximadamente) para cerca de US$ 3.700 millones. La canalización se volvió la obra pública más cara de Brasil, actualmente.

Obviamente, la parte de los canales que llegó a entregarse hoy en día está dañada, con muchas grietas en la estructura de hormigón expuesta al sol por años, sin mantenimiento.

Pero el gobierno del país dice que esto ahora es pasado, de acuerdo a la prensa nacional. De acuerdo al Ministerio de Integración Nacional de Brasil, los dos ejes sumados encuentran un 57,8% de avance en su construcción. El número de trabajadores empleados hoy es de más de 10.000, según el gobierno, y deberá subir a los 11.000 hasta el fin de año.

Si hasta hoy ningún tramo fue inaugurado y las reparaciones se hacen necesarias en lo que fue construido, el gobierno piensa ya en expandir la obra e incluir dos ejes más, el Sur y el Oeste. No se sabe si esto será posible todavía. Asimismo no hay una fecha prevista para entrega de los dos ejes originales.

La principal dificultad técnica del proyecto está en la construcción de estaciones de energía y bombeo a lo largo de los muchos kilómetros en dos canales. Pero además, el proyecto prevé también la construcción de 36 presas, siete túneles, 63 puentes, 35 pasos sobre nivel y 165 puntos para toma del agua del río.