El GNL gana terreno
11 December 2012
En Latinoamérica se habla mucho del gas natural licuado (GNL), de hecho actualmente hay varios proyectos con este combustible en la región siendo Pampa Melchorita, en Perú, quizás uno de los más destacados. En general este combustible es utilizado para la generación de energía pero de a poco se ha ido ganando espacio en el parque automotriz regional.
Hoy la tendencia es también contar con motores alimentados por GNL en grandes equipos mineros y de construcción. En este contexto Shell, importante proveedor de este hidrocarburo, está activamente desarrollando instalaciones de gas natural licuado a pequeña escala alrededor en Latinoamérica.
Por el gran interés que reviste el tema como alternativa al uso del combustible diesel convencional, Construcción Latinoamericana conversó con Paul Evers, Product Application Specialist Heavy Duty Diesel Engine Oils - Shell Global Solutions.
¿Qué compañías ya trabajan con GNL?
Debido a los diversos usos y aplicaciones del GNL, muchas fábricas ya han adaptado su infraestructura y procesos y ahora ofrecen motores que utilizan este combustible. Hablamos de compañías como Cummins, Iveco, MAN, Mercedes-Benz, Renault, Scania y Volvo. La utilización del GNL se está incrementando y sus beneficios son cada día más visibles.
Pero así como cambian los combustibles, cambian también los cuidados a los motores. Shell ofrece una amplia gama de lubricantes para maquinaria de GNL bajo las marcas Shell Rimula y Shell Rotella, las cuales han sido aprobadas por los fabricantes previamente mencionados. La compañía está también colaborando con otras empresas con la finalidad de entender mejor el funcionamiento de los motores que utilizan este combustible y está también desarrollando su propia investigación para poder tratar cualquier tema relacionado con el gas.
¿Cuáles son las ventajas y desventajas?
La mayor ventaja del GNL es que es un combustible de precio competitivo, por lo tanto, se reduce la inversión en este ítem, comparado con el diesel. Unos 900 grs de GNL contienen la misma energía que un kilo de diesel, sin embargo, el GNL tiene un contenido más bajo de energía volumétrica debido a su menor densidad. Por otro lado, el GNL también es más limpio y tiene potencial para reducir las emisiones de gases de efecto invernadero desde la extracción del mismo hasta la aplicación en la maquinaria.
En la actualidad existen dos tecnologías disponibles para los motores que utilizan GNL que se diferencian por su encendido, los de encendido por chispa (Spark Ignition, SI) y los motores de ignición por compresión (Compresion Ignition, CI). Estos luego se dividen en “Stoichiometric SI”, “mezcla pobre SI”, “CI fumigado” y HPDI (inyección directa de alta presión). Todos ellos tienen pros y contras y diferentes sistemas de tratamiento post-uso.
La tecnología de GNL es más cara que los nuevos motores de diesel y por este motivo requiere una mayor inversión inicial. Sin embargo, el combustible GNL ayudará a un mayor ahorro monetario en un futuro cercano, el cual se incrementará con el tiempo; mientras que con el diesel sucede lo contrario además de que los costos de mantenimiento aumentan.