Gigante por sus malls

Si bien la situación económica de Brasil registra desaceleración, el gigante sudamericano está experimentando impactos positivos en los números de la construcción en diversos aspectos. Uno de ellos tiene que ver directamente con la creciente capacidad de consumo de la sociedad, lo que se ha traducido en la construcción de grandes centros comerciales, o malls. La Asociación Brasileña de Shopping Centers (Abrasce) estima que hasta fines de 2013, Brasil tendrá un total de 495 de estas estructuras en su territorio, lo que implica nada menos que 38 inauguraciones en solo un año. Y el ritmo de construcción de nuevos centros no es algo nuevo. En 2010 eran 408 malls, pasando a 430 en 2011 y luego a 457 en 2012. Hoy, sin contar 11 inauguraciones previstas en lo que resta del año, hay 30.460.000 metros cuadrados de área construida con malls en Brasil.

Adriana Colloca, superintendente de operaciones de la Asociación, dice que este crecimiento se da con base en estudios de mercado que confirman el aumento de los ingresos en la sociedad y el consecuente potencial de consumo cada vez más grande. Según la ejecutiva “no hay un crecimiento desordenado” y el índice de área arrendable de malls en Brasil (medida usada por el comercio retail en el mundo) muestra que todavía hay espacio en el horizonte para que el sector siga creciendo. “En Estados Unidos la proporción es de 221 metros cuadrados de área arrendable por 100 habitantes, mientras que en Canadá es de 146 metros cuadrados, y en Portugal y España es de alrededor de 33 metros cuadrados. En Brasil esta relación es de 6,2 metros cuadrados”, afirma Colloca.

De hecho esto es lo que parece confirmar el potencial marcadamente alto de la economía brasileña para recibir nuevas inauguraciones de malls. Según la superintendente para 2014 están previstas aún más inauguraciones que en 2013: se espera un sonoro número de 41 nuevos malls en el país el año próximo. Si se confirman las previsiones de Abrasce, Brasil contará con 536 malls de acá a un año.

El sector atrae constructoras y operadoras comerciales al país. El grupo portugués Sonae Sierra es un ejemplo. Con la inauguración en 2013 del Passeio de Águas Shopping en la ciudad de Goiania, capital del estado de Goiás, el grupo llegó a su 10º mall en Brasil. En los últimos dos años Sonae Sierra ha invertido en el país más de US$400 millones, recursos destinados exclusivamente a la construcción de malls.

La opción por Goiania, ciudad con economía fuerte por la agricultura y ganadería, pero sin gran expresión urbana, tiene su razón. Mientras ciudades como Sao Paulo, con 53 malls, o Rio de Janeiro, con 35, pueden ser mercados más difíciles para construir, hay docenas de ciudades donde el potencial está aún casi inexplorado. La misma Goiania tiene solo nueve malls. Florianópolis, que es capital del rico estado de Santa Catarina, cuenta solo con tres. Recife, con una población de 1,5 millón de personas, tiene seis.

Pero como el aumento de ingreso familiar se está distribuyendo mejor en en las regiones de Brasil, tanto las ciudades medianas de estados más ricos, como Sao Paulo, Rio de Janeiro y Minas Gerais, como las capitales de estados menos desarrollados, como Pernambuco, Ceará, Mato Grosso o Pará, deberán ser las que concentrarán las próximas inversiones en construcción de nuevos malls brasileños.