Gobierno de Brasil presenta su plan de concesiones
13 September 2016
El gobierno de Brasil finalmente dio a conocer el primer paquete de proyectos y activos que se van a licitar para concesión o privatización de ahora hasta el año 2018 en el país.
De acuerdo con el comité del llamado PPI (programa de asociaciones para inversión, en portugués), la iniciativa es una “extraordinaria oportunidad para la iniciativa privada”.
El listado de proyectos y activos públicos que se van a concesionar empezará con los cuatro aeropuertos cuyos procesos de concesión ya estaban más avanzados. Ellos son los de Salvador, Florianópolis, Porto Alegre y Fortaleza, cuyas bases de licitación deberán conocerse en el primer trimestre del próximo año.
Para el segundo trimestre de 2017 están agendadas las concesiones de dos terminales portuarios, uno en Santarém, estado de Pará (dedicado a combustibles), y uno en Río de Janeiro (dedicado al transporte de trigo).
La parte de carreteras entró en el paquete de concesiones con un conjunto de tramos. También en 2017 se deberán concesionar una conexión entre los estados de Minas Gerais y Goiás (BR 364 y BR 365), y cuatro tramos federales en el estado de Rio Grande do Sul (BR 101, BR 116, BR 290 y BR 386).
El sector de ferrovías destaca en el paquete de concesiones PPI. Importantes tramos se van a concesionar desde el segundo semestre de 2017. Ellos son la conexión entre los estados de São Paulo, Minas Gerais, Goiás y Tocantins de la ferrovía Norte Sur; la conexión entre los estados de Mato Grosso y Pará de la ferrovía Ferrogrão; y un tramo de la ferrovía Integración Oeste Este en el estado de Bahía.
Seis distribuidoras de energía deberán ser privatizadas entre el segundo semestre de 2017 y el primer semestre de 2018. Ellas son las de los estados de Amazonas, Roraima, Acre, Alagoas, Piauí y Rondônia.
Tres hidroeléctricas de mediano porte (São Simão, Miranda y Volta Grande) que hoy pertenecen a la compañía de energía del estado de Minas Gerais van a venderse en el segundo semestre de 2017, según el gobierno.
Cuatro sesiones de subasta pública de áreas de exploración de petróleo y gas en tierra y mar están previstas para 2017, como parte del PPI.
Además, el sector de saneamiento básico está contemplado con las privatizaciones de tres compañías de agua y alcantarillado de importantes estados: Río de Janeiro, Rondônia y Pará. En estos casos, se privatizará la distribución de agua, recolección y tratamiento de residuos.
Finalmente, áreas de minería no exploradas, que están bajo administración de la estatal Compañía de Producción de Recursos Minerales serán concesionadas. Se estima que entre ellas hay yacimientos de oro, cobre, carbón, fosfato y otros.
El gobierno afirma que estos son sólo los primeros proyectos que salen a la luz dentro del llamado PPI. Con ello, se espera recuperar la inversión y el crecimiento económico de Brasil, que se ve derrumbado por dos años consecutivos de recesión luego de un año de crecimiento del 0%.