Kuczynski respalda Panamericanos en Lima

El presidente peruano Pedro Pablo Kuczynski respaldó esta semana la realización de los Juegos Panamericanos Lima 2019. Esto luego que muchos cuestionamientos están surgiendo en el país con respecto al compromiso de capital necesaria al evento.

“A pesar de editoriales que nos dicen que no hay que hacer los Panamericanos aquí, que es un desperdicio de dinero, vamos a hacerlo”, dijo el mandatario en evento público.

Recientemente, los organizadores del comité local fueron al Congreso peruano para presentar sus necesidades financieras y recibir de los parlamentarios el apoyo y autorización para ejecución del presupuesto. Parte de los parlamentarios no se sintieron totalmente aclarados con respecto a los montos presupuestados.

De acuerdo con los organizadores, los Juegos Panamericanos y Parapanamericanos Lima 2019 pueden costar entre US$ 735 millones y US$ 940 millones, pero el valor es todavía una estimación.

El proyecto prevé la construcción de nueve infraestructuras deportivas y de apoyo a los eventos, siendo la principal la villa panamericana, espacio de residencias temporales para los atletas y delegaciones internacionales. Como se suele planificar en estos eventos, Lima 2019 construirá la villa con objetivo de venderla como condominio residencial luego de los juegos.

¿Por qué hacer?

El tema de los costos e ingresos potenciales siempre vuelve con la planificación de megaeventos deportivos. Mientras hay casos de mal utilización de los legados y endeudamientos en niveles peligrosos, como el de Atenas 2004, también hay casos económicamente exitosos, como el que acaba de suceder en Río de Janeiro.

Según el balance oficial presentado por la Alcaldía de Río, en las tres semanas de Olimpiadas la ciudad recibió 1,17 millón de turistas, siendo poco más de un tercio proveniente del extranjero. El promedio de gasto de los turistas generó un ingreso en comercio y servicios en el municipio cercano a los US$ 2.700 millones.

El movimiento en bares y restaurantes creció un 70% durante el evento en las áreas más turísticas de Río, mientras que en otras áreas creció al menos un 20%.

El promedio de ocupación de la red de hoteles durante el evento fue de un 94%, lo que es muy superior a los 65% promedio de ocupación para los meses de agosto en la ciudad. Además de eso, se generaron importantes ingresos para los sectores de aviación, servicios aeroportuarios y transporte marítimo de turistas.

En términos de legado, Río de Janeiro construyó para los Juegos Olímpicos un conjunto de grandes transformaciones, casi todas hechas en esquemas de asociación público-privada, como la recuperación de la región portuaria, la construcción de un sistema de tren urbano ligero, una nueva línea de metro y cuatro líneas de transporte en buses rápidos tipo BRT. La infraestructura deportiva obviamente no quedó atrás y recibió un aporte significativo de nuevas instalaciones.