La construcción consume el 75% de los recursos naturales del planeta
07 February 2024
El tema es cada vez más debatido y aún queda mucho por hacer.
La industria de la construcción consume una cantidad desenfrenada de recursos naturales, que no pueden ser reproducidos por el hombre, ya que son el resultado de fenómenos naturales. Su renovación tiene lugar a lo largo de intervalos de tiempo geológicos significativamente largos y, si se agotan, se vuelven irrecuperables. Por tanto, es crucial adoptar soluciones que satisfagan las necesidades presentes sin poner en peligro las demandas futuras.
Atención a los detalles
El correcto almacenamiento y segregación de estos residuos también requiere toda la atención de los responsables de su gestión. A la hora de almacenar los residuos reciclables, es fundamental protegerlos y separarlos en función de sus características, evitando así el riesgo de contaminación y accidentes y garantizando su correcta eliminación.
Además, para realizar un correcto almacenamiento con vistas a la utilización de materiales reciclados en la construcción, es necesario cumplir la legislación medioambiental para evitar sanciones. Los residuos reciclables deben almacenarse en zonas exclusivas para este fin, con cubierta y suelo impermeable, debidamente identificadas.
Los materiales de la Clase I deben seguir las normas de la NBR 12.235:1992, mientras que los residuos de la Clase II deben almacenarse de acuerdo con lo especificado en la NBR 11.174:1990.
El contenedor estacionario es uno de los equipamientos más adecuados para la recolección de residuos de la construcción, así como el compactador, muy utilizado para prensar los materiales y reducir su volumen.
En lo que se refiere a la eliminación adecuada para cada tipo de residuo, ésta debe ser determinada de acuerdo con las normas y reglamentos locales pertinentes.
Ecotrans Ambiental cuenta con experiencia en la eliminación de residuos.
La empresa, comprometida con el medio ambiente, se preocupa de gestionar los residuos correctamente. Estamos especializados en la recogida de residuos de la construcción y disponemos de un mecanismo diseñado para facilitar el transporte, la eliminación y la reubicación de estos materiales.
La recogida de residuos de la construcción por parte de Ecotrans Ambiental permite reutilizar los productos, especialmente para pavimentar calles, contener taludes y otras opciones. Estos métodos hacen que, además de preservar la naturaleza, los ayuntamientos y otras organizaciones que reutilizan estos materiales puedan ahorrar dinero.
“Cuando se piensa en obras, es casi imposible no pensar en la cantidad de materiales rotos o que ya no se van a utilizar que acaban sobrando en la obra, ya sea de una reforma o de una nueva construcción. Lamentablemente, estos residuos acaban eliminándose de forma incorrecta en vertederos o terrenos baldíos. La forma más adecuada de eliminar estos objetos es recoger los residuos de la construcción. Esto permite eliminar de forma correcta los restos de bloques, cemento y baldosas, entre otros”, afirma la empresa.
El Portal de Residuos Sólidos es otra organización que trata de difundir conocimientos sobre el tema.
Para la organización, la eliminación inadecuada en zonas urbanas puede provocar inundaciones al obstruir el sistema de drenaje, además de convertirse en fuente de vectores de enfermedades. Por otro lado, cuando estos residuos se depositan en zonas naturales, provocan desequilibrios en los ecosistemas, perjudicando a la fauna y la flora. La contaminación del suelo y de las aguas subterráneas también es preocupante, así como la contribución al agotamiento de los recursos naturales al desechar materiales que podrían reciclarse o reutilizarse.
La regulación de los residuos de la construcción es una parte importante de la política medioambiental de Brasil.
Según el Portal, hay que hacer la siguiente distinción:
La clasificación de los residuos de la construcción en Brasil está regulada por la Resolución CONAMA 307/2002, del Consejo Nacional del Medio Ambiente (CONAMA). Según esta reglamentación, los residuos se clasifican en cuatro categorías:
I - Clase A - son residuos que pueden ser reutilizados o reciclados como agregados, tales como:
procedentes de la construcción, demolición, renovación y reparación de pavimentos y otras obras de infraestructura, incluida la tierra procedente de movimientos de tierras;
procedentes de la construcción, demolición, renovación y reparación de edificios: componentes cerámicos (ladrillos, bloques, tejas, placas de revestimiento, etc.), mortero y hormigón;
procedentes del proceso de fabricación y/o demolición de piezas premoldeadas de hormigón (bloques, tubos, bordillos, etc.) producidas en obras de construcción;
Ejemplo de Residuos de Construcción pertenecientes a la Clase A, es decir, procedentes de la construcción, demolición, renovación y reparación de pavimentos y otras obras de infraestructura, incluida la tierra procedente de movimientos de tierras.
II - Clase B - residuos que pueden ser reciclados para otros usos, como plásticos, papel, cartón, metales, vidrio, madera y yeso;
III - Clase C - residuos para los que no se han desarrollado tecnologías o aplicaciones económicamente viables que permitan su reciclaje o valorización;
IV - Clase D - residuos peligrosos procedentes del proceso de construcción, como pinturas, disolventes, aceites y otros, o los contaminados o nocivos para la salud procedentes de la demolición, renovación y reparación de clínicas radiológicas, instalaciones industriales y otras, así como tejas y otros objetos y materiales que contengan amianto u otros productos nocivos para la salud. Residuos peligrosos, como pinturas, disolventes, aceites o residuos contaminados procedentes de la demolición, renovación y reparación de clínicas radiológicas, instalaciones industriales, entre otros.
“El enfoque correcto fomenta la sostenibilidad en el sector de la construcción y promueve la economía circular. También puede generar ahorros para las empresas, que tienen la oportunidad de reutilizar o vender materiales reciclados. Por último, pero no menos importante, contribuye al cumplimiento de la legislación ambiental, evitando posibles sanciones”, reitera Gleysson B. Machado, especialista en convertir problemas ambientales en negocios sostenibles. Licenciado en Dip. Ing. Verfahrenstechnik (Ingeniería Química) en la Universidad de Ciencias Aplicadas de Frankfurt/M (Alemania), con especialización y experiencia en Tecnologías de Generación de Energía e Ingeniería Medioambiental.
El mismo razonamiento se aplica al Grupo Renova. Con más de 30 años de experiencia, el Grupo Renova dispone de equipos e instalaciones de última generación y está en condiciones de ofrecer a sus clientes productos y servicios de calidad y origen garantizados, contando en la actualidad con la certificación ISO-14001.
Renova Ambiental realiza la Gestión Total de Residuos (GTR) dentro de la propia planta industrial del cliente, siguiendo los preceptos de Vertedero Cero establecidos en la Política Nacional de Residuos Sólidos. Este servicio es la solución más adecuada para los clientes que generan diferentes tipos de residuos y no pueden adoptar un único tipo de tecnología de eliminación. Esto es lo que nos diferencia.
Renova Ambiental, pionera en la Gestión Total de Residuos Industriales en Brasil, trabaja actualmente con refinerías, industrias automovilísticas, químicas y otras en diversas regiones del país.
Al reutilizar los residuos en sus propios procesos de producción, se pone en valor la Economía Circular y se benefician los índices de sostenibilidad. Foto: Renova
La planificación se guía por la consolidación de informes de gestión, trazabilidad, generación de residuos, etc., ayudando a los clientes a contribuir a la mejora de sus indicadores ESG (Environmental, Social and Corporate Governance).
“El tratamiento y la eliminación adecuados de los residuos industriales gozan de un reconocimiento cada vez mayor en todo el mundo. Ya sea por el avance hacia la certificación ISO 14001 o por el compromiso con la responsabilidad social. En cualquier caso, la cuestión de la sostenibilidad se está planteando en las empresas, al igual que la toma de conciencia de que pueden y deben obtener beneficios de casi todo lo que simplemente desechan”, afirma Alberto Kondor, director de producción.
Actualidad
En la actualidad, los residuos de la construcción se reciclan y reutilizan de las siguientes formas:
Áridos reciclados: Materiales como hormigón, ladrillos y otros elementos de albañilería de clase A pueden triturarse y utilizarse como áridos en la fabricación de hormigón nuevo o como base para carreteras y otros proyectos de infraestructuras.
Reutilización directa: Ciertos materiales, como puertas, ventanas o vigas de madera, pueden reutilizarse directamente en nuevas construcciones o reformas.
Reciclaje de metales: Los residuos metálicos como el cobre, el acero y el aluminio pueden reciclarse para fabricar nuevos productos metálicos.
Reciclaje de madera: la madera puede triturarse y utilizarse como mantillo, abono orgánico o procesarse para fabricar tableros de partículas y otros productos de madera.
Recuperación de tierras: Algunos tipos de residuos, como la tierra y las piedras, pueden utilizarse para recuperar tierras, vertederos o en proyectos de paisajismo.
Producción de energía: Algunos tipos de residuos pueden utilizarse para producir energía, por ejemplo, mediante la incineración en plantas de recuperación de energía.
Kawsay Reciclaje: Una disposición eficiente En un contexto donde la sostenibilidad ambiental y el reciclaje cobran cada vez más importancia, Kawsay Reciclaje, con base en Chile, se destaca como en la gestión de residuos no peligrosos. La empresa ha desarrollado e implementado estrategias para el reciclaje de materiales diversos como vidrio, plástico, y latas de aluminio, así como hojalata y tetra pack, recientemente incorporados a su programa. Su expansión en el sector corporativo incluye la recolección de madera, metales, cartón, cerámica y papel decorativo, además de siete tipos de plásticos industriales no peligrosos, extendiendo su impacto a través de un modelo de reciclaje integral. Hoy, la compañía trabaja con aproximadamente una docena de obras de construcción. “Con algunas llevamos un poquito más de un año y la verdad es que al principio costó un poco partir porque no todas las obras tienen, por ejemplo, un encargado de medio ambiente o de reciclaje. Entonces cuesta un poco porque es más sencillo cuando hay alguien que se hace cargo de la gestión del residuo. Pero a partir del Acuerdo de Producción Limpia (APL) la información que nos han ido entregando ha sido súper clara y súper certera, entonces esto nos ha permitido organizar de mejor manera la gestión de los residuos en origen”, comenta Andrea Collado, administradora de Kawsay Reciclaje. De acuerdo con la ejecutiva los materiales que más se reciclan en la construcción son madera, metales y yeso. “El cartón podría ocupar un cuarto lugar, pero nosotros lo tratamos como residuo domiciliario porque es más que nada un embalaje”, comenta. Según informa Collado, la madera se vende y se recupera un porcentaje de dinero, el cual es retornado a la construcción. “La madera se recicla en un 100% y se hacen diferentes cosas, principalmente de modo decorativo en los jardines, para aprovechar el recurso hídrico, evitando que el suelo se seque completamente, ya que la madera tienen la capacidad de absorber una gran cantidad de agua, que luego va liberando de a poco, entonces mantiene hidratado el suelo por un periodo más largo”. A otros residuos de la construcción como, por ejemplo, el yeso, cartón, fibrocemento o los restos de cerámicas, se hace un tratamiento y se transforman en un árido reciclado o supra reciclado. La ejecutiva recalca la importancia de que las empresas constructoras tengan la voluntad de querer hacer algo nuevo y emplear el personal suficiente para poder llevar a cabo esta tarea. “Deben estar dispuesto a hacer una inversión con respecto a la disposición correcta de los residuos, porque no tiene sentido seguir utilizando recursos económicos como, por ejemplo, lo que se hace cuando se bota la basura y se te llena una tolva de residuos mezclados que sabemos que van a ir a ser enterrados. No tiene sentido seguir gastando ese mismo dinero cuando podemos emplear esos recursos en hacer una disposición eficiente de los residuos que estamos generando y con ello tener el respaldo legal, medioambiental y social”. |