Liebherr LSL 1500: equipo con historia

“Cuando desarrollamos cargadoras de ruedas, nos ocupamos a diario de las últimas tecnologías y tendencias. Sin embargo, también respetamos nuestras raíces. Y esta cargadora de ruedas aquí muestra que Liebherr estaba haciendo despegar conceptos de máquinas innovadoras hace incluso seis décadas”, explica Martin Gschwend, director general de la planta de Liebherr Bischofshofen y responsable de la distribución mundial de las cargadoras de ruedas Liebherr.

De chatarra a pieza de exhibición

Después de algunos años en una fábrica de grava en la zona de Biberach, la máquina llegó al grupo empresarial Fried-Sped en Ummendorf en la década de los ‘80, donde sirvió durante unos 20 años. A principios del 2000 Liebherr recuperó el prototipo y conservó la cargadora de ruedas hasta ahora.

El proyecto comenzó en la primavera de 2020, cuando los expertos en cargadoras de ruedas de la compañía renovaron cada parte de la LSL 1500 hasta el último tornillo. En muchas ocasiones se requirió habilidad técnica y talento para la improvisación. “Cuando arranca el motor diesel, el voltaje de funcionamiento cambia repentinamente de 12 a 24 voltios. Primero tuvimos que analizar este proceso correctamente para poder poner en marcha la cargadora de ruedas con éxito. Fue un momento espléndido cuando escuchamos el potente motor diesel de seis cilindros en marcha por primera vez”, dice Andreas Scharler, quien dirigió el centro de reparación durante muchos años.

Un pedazo de la historia

En la década de 1950, Liebherr ya estaba experimentando con cargadoras de ruedas, un tipo de máquina todavía en sus primeros pasos y poco desarrollada en ese momento. Los dos primeros prototipos de Liebherr, los modelos “Elephant” y “Mammoth”, todavía tenían que hacer frente a un mayor desgaste de los neumáticos y una tracción modesta.

A principios de la década de 1960, Liebherr logró crear un prototipo confiable de cargadora de ruedas con el LSL 1500, con un peso de alrededor de diez toneladas y 108 hp. Leibherr produjo una serie piloto de cinco unidades. El LSL 1500 tenía un bastidor rígido y una dirección en las ruedas traseras con soporte hidráulico que era un lujo para la época. La transmisión de carga se logró mediante un convertidor de par y una tracción a las cuatro ruedas, que opcionalmente se podía desconectar.

La nueva cinemática proporcionó una altura de descarga de alrededor de tres metros y permitió la carga de vehículos de obra con alturas laterales mayores. En caso de mal tiempo, se dispuso de una cubierta para todo clima con ventanas transparentes y calefacción para la plataforma del operador, que todavía era abierta. Con orgullo, Liebherr describió su LSL 1500 en una hoja de datos como un “nuevo diseño basado en muchos años de experiencia en la construcción de máquinas para movimiento de tierras”.