Müller viene con todo

La división Randon Veículos es donde las Empresas Randon tenían su portafolio de equipos para construcción, como la retroexcavadora RD 406, la mini cargadora RD 75R, la pala RD 410 y el camión RD 430Me. Con la compra de este portafolio, y otros activos asociados , la tradicional marca de compactadores puede ahora entrar en el mercado más importante de los equipos pesados.

Hoy en día, Müller forma parte del Grupo Romac, que es una empresa de distribución de equipos pesados en Brasil que cuenta con la representación de marcas como Doosan Bobcat, Ammann y Pramac en partes del sur de Brasil. Incrementando su marca de productos industriales, Romac se vuelve, según la empresa, en el principal jugador nacional en el mercado de línea amarilla de Brasil en lo que respeta portafolio de máquinas.

Consolidar la inversión

Jefferson Recus, director administrativo de Müller, dijo a CLA que el objetivo en los primeros tiempos de la adquisición es consolidar la inversión. “Con esta adquisición, Müller tiene el mayor portafolio de línea amarilla en Brasil, y nuestra idea es fortalecer la división industrial. La producción será de entre 40 y 50 máquinas por mes, ritmo que será igual al que mantenía Randon Veículos”, afirma. La fabricación será en la unidad fabril de Müller en la ciudad de Gravataí, estado de Rio Grande do Sul.

Con la adquisición, Müller hereda la red de distribución de los equipos Randon, lo que de inmediato amplía exponencialmente su alcance comercial. De acuerdo con Recus, la intención es mantener la red de distribuidores en todos los estados con la excepción de los estados del sur de Brasil, donde Romac actuará en venta y post venta de los nuevos modelos Müller. Para el resto de Brasil y demás países latinoamericanos que tengan la marca de equipos Randon, la idea es que estas empresas pasen ahora a representar las líneas de máquinas Müller.

En conclusión, Jefferson Recus dice que no es el momento para hablar de ampliar aún más el portafolio. De hecho, el plan de corto y mediano plazo es absorber la fabricación de los modelos de Randon para establecer Müller en el mercado de línea amarilla en Brasil y países vecinos.

Pero nada impide estimar qué nuevos desarrollos puedan venir a futuro. “Hoy en día, Müller tiene cerca de 35 personas trabajando, y con este proyecto podremos llegar a tener unas 80. Y tenemos nuestra propia ingeniería para desarrollar productos”, comenta el ejecutivo.

De manera que, si todo les va bien, muy posiblemente la marca tendrá más presencia en las municipalidades, edificaciones y mantenimientos urbanos en Brasil, que son los mercados de entrada para equipos amarillos. Si el país reanuda sus inversiones en infraestructura pesada, más chance habrá para que Müller vuelva con todo al mercado.

“Junto con comprar el negocio de Randon, estamos adquiriendo el know-how. Es bueno para Brasil tener una gran marca nacional para su mercado interno y toda América Latina”, concluye el ejecutivo.