Mercado en análisis

En abril, tuvo lugar en São Paulo el evento Foro InfraRoi de Hormigonado Productivo, una realización de la asesoría de marketing de contenido brasileña Canaris, quien mantiene el sitio de estudios de mercado InfraRoi. En el evento, del que la representación en Brasil del KHL Group participó como media partner, Canaris lanzó el libro electrónico Hormigonado Productivo, del periodista y director de la empresa Rodrigo Conceição Santos.

El evento de debates contó con la participación de importantes empresas del sector de concreto en Brasil, muchas de ellas nacionales y también multinacionales: Liebherr, MC Bauchemie, Metso y Hyundai entre las extranjeras; Intercement, Itacomix, Canteras Embu y RCO entre las participantes nacionales.

Para Rodrigo Conceição, el evento se promovió por una fundamental necesidad de discutir mejores prácticas en toda la cadena de concreto en Brasil.

“La cadena del hormigón en Brasil es dispersa y poco colaborativa en lo que respecta el intercambio de informaciones tecnológicas que aumente su productividad y la calidad. Ella también es poco representativa institucionalmente para el incremento tecnológico y productivo. Estos fueron los motivos que nos han llevado a organizar este foro e iniciar un debate sobre cómo hacer los hormigonados más productivos y rentables en Brasil”, dijo el ejecutivo.

Problemas

Merece aplausos el coraje que el sector brasileño de hormigón demostró al discutir abiertamente sus imperfecciones y prácticas equivocadas. Así fue durante el Foro de Hormigonado Productivo. Mientras los proveedores de equipos, como Metso y Liebherr, presentaron sus novedades de producción de agregados y en central dosificadora, respectivamente, especialistas de los demás actores de la cadena dieron sus visiones sobre dónde el sector puede cambiar para mejor.

Guilherme Zurita, gerente comercial de Tecnologías de Concreto de Liebherr Brasil, presentó la línea de centrales modulares Betomix, las que por sus muchas variaciones de ocupación del espacio pueden generar grandes ahorros si se considera los niveles de diésel gastado con el movimiento de la hormigonera entre las colocaciones de insumos, agua adicional, maniobras y salida hacia la obra.

La aplicación de mejores equipos es sin dudas una contribución necesaria a mejorar los estándares de producción, comercialización y aplicación de concreto en Brasil. Sin embargo, hay puntos que deben modificarse por otras vías.

Uno de ellos es la atrasada legislación que clasifica el concreto producido en centrales mezcladoras como producto industrial, lo que determina la imposición de un tributo adicional sobre el hormigón.

La cobranza por el Estado del Impuesto sobre Productos Industrializados sobre hormigón mezclado en central daña el sector. Previene que en Brasil se aproveche las ventajas de homogeneidad del concreto pre mezclado, y condena el mercado a trabajar con las imprecisiones muchas veces grotescas de la mezcla hecha en hormigoneras.

La realidad en Brasil es que las centrales mezcladoras sólo se utilizan en grandes obras de infraestructura, que suelen instalar sus propias centrales. Para todo lo demás, se sigue usando centrales dosificadoras y mezcla en hormigonera, aun cuando esto no tiene sentido económico en el largo plazo. Cambiar esta regla es un buen punto de partida para un mercado de hormigón más productivo en Brasil.