México revoca licitación del tren rápido
07 November 2014
El presidente de México, Enrique Peña Nieto, decidió revocar la licitación del tren rápido Ciudad de México – Querétaro, que hace pocos días fue adjudicada al único consorcio competidor que era liderado por la constructora estatal China Railway Construction Corp. El gobierno va reabrir la licitación en fecha aún no conocida.
La decisión se produjo después que la adjudicación fue puesta en cuestión y criticada por la sociedad mexicana. “En razón de las dudas e inquietudes que han surgido en la opinión pública sobre el procedimiento de licitación del tren de alta velocidad México – Querétaro, el presidente tomó la decisión de revocar el fallo del pasado día 3 de noviembre y reponer el procedimiento, dando tiempo más amplio para presentar ofertas por parte de los fabricantes de trenes”, dijo el Secretario de Comunicaciones y Transportes del gobierno, Gerardo Ruiz Esparza. El punto principal, de acuerdo al funcionario, es “más transparencia y que no haya dudas sobre el proceso”.
La adjudicación al único consorcio postor del proyecto del primer tren de alta velocidad en América Latina se dio bajo polémica porque hubo una diferencia importante entre el valor presupuestado por el gobierno y el valor presentado por el consorcio.
Mientras que el gobierno presupuestó el proyecto en US$ 3.750 millones, el consorcio exigió la inversión de US$ 4.320 millones. Como era el único competidor, no hubo condiciones de adjudicar el proyecto por valor menor. Nada menos que 16 empresas entregaron cartas de disculpas por no participar del proceso hasta el final, pese el interés que habían demostrado en él.
Desconfianza
La cancelación de una licitación adjudicada es un hecho que suele despertar desconfianza en los mercados, pues en general se la entiende como un acto de falta de respeto a los contratos comerciales. México deberá estar protegido contra este efecto porque, aunque haya tomado una decisión contraria a su propio proceso licitatorio, viene reformando sus estructuras legales de manera muy intensa con el objetivo de facilitar la inversión privada nacional y extranjera. Un ejemplo es el reciente anuncio de una reforma a la Ley de Obras Públicas.
Leyes
En medio a la movida inesperada de revocación de la licitación, el presidente Peña Nieto firmó una iniciativa que pretende introducir reformas a la actual ley de obras públicas del país. El objetivo es agilizar la contratación y procedimientos en obras públicas, así como favorecer la transparencia y competencia en los proyectos.
Entre algunas de las modificaciones, la iniciativa establece nuevos mecanismos para la evaluación y gestión de los proyectos, la incorporación de la figura de “Gerenciamiento de Proyecto”, y la utilización de la plataforma CompraNet, que busca ser una página guía que fomente la trasparencia y la agilidad para ejecutar las contrataciones.
Peña Nieto destacó que “reglas claras, sencillas y eficaces permitirán acelerar el desarrollo de los grandes proyectos que requiere el país para elevar su productividad y ser más competitivo”. Por su parte, el secretario Ruiz Esparza dijo que de ser aprobada por el Congreso, la reforma hará “más ágiles y transparentes los procesos de licitación, contratación, ejecución y terminación de las obras”.