Nueva casa de la construcción

Los que participan de las ferias de construcción en Brasil saben que el centro de exposiciones Imigrantes, en São Paulo, siempre ha sido sede de los grandes eventos del sector. Recientemente, el centro de eventos pasó por una completa transformación, la que estuvo a cargo de la constructora brasileña Fonseca & Mercadante. Ahora inaugurado y en funcionamiento, las nuevas instalaciones tienen también nuevo nombre: São Paulo Expo, la nueva casa de la construcción en el país.

La historia de este contrato comenzó con la contratación de Fonseca & Mercadante para construir el nuevo edificio estacionamiento al lado del antiguo Imigrantes. Este proyecto preveía la edificación de un estacionamiento vertical para cerca de 4.500 autos en un área aproximada de 100.000 m².

En el intertanto, la concesionaria del centro de exposiciones, la multinacional francesa GL Events, abrió la convocatoria para la ampliación y remodelación del mismo centro. Fonseca & Mercadante, quien ya había probado y demostrado su capacidad operacional en la obra del estacionamiento, también ganó este contrato.

El principal desafío fue el plazo. Diez meses para el estacionamiento vertical (entre febrero y noviembre de 2015), y diez meses para el centro de exposiciones (entre julio 2015 y abril 2016). En total, se intervino un espacio de 166.000 m² en 15 meses, con un costo total cercano a los US$110 millones. En los momentos de mayor actividad, la obra contó con hasta 800 trabajadores. La constructora finalmente entregó ambas estructuras el 26 de abril, oportunidad en que se inauguraron los nuevos edificios dentro del estrecho plazo contratado. El cumplimiento del plazo exigió de Fonseca & Mercadante una gestión muy cercana de la obra, además una opción correcta en la provisión de equipos e insumos. La totalidad de los equipos utilizados fueron alquilados, provenientes de empresas como Mills, RentalFort y MASRental. Además, las estructuras son todas de hormigón pre moldeado.

Técnicamente, el nuevo São Paulo Expo demandó de los ingenieros de Fonseca & Mercadante la demolición de parte del centro antiguo y la construcción desde cero de una nueva estructura, proyectada con una altura entre 10 y 14 metros, y con intervalos de 72m y 54m entre los pilares. Los enormes vacíos en la estructura exigieron el uso de elementos metálicos de cobertura muy vigorosos para darle sustentación al sistema. Por este espacio transitarán los equipos más grandes, como grúas o camiones articulados.

Confianza

Esta obra tiene una historia tras bastidores que revela cómo la confianza y los valores personales influyen en los negocios.

Mientras se construía el estacionamiento vertical, GL Events convocó la obra de ampliación del centro de exposiciones. Fonseca & Mercadante postuló. De acuerdo con el director operacional de la constructora, Marcos Vicelli, “fue nuestro buen trabajo en el estacionamiento que nos abrió las puertas al contrato del centro”.

“La negociación final se dio en Lyon, Francia, con el presidente mundial de GL Events, el empresario francés Olivier Ginon. Él nos dijo que tenía confianza en nosotros y nos informó que el plazo de abril tenía que cumplirse de todas maneras porque para poco después ya había comprometida una feria para el São Paulo Expo. Nos dijo que esta era su obra más importante en el mundo, y prometió venir a Brasil mensualmente para seguirla de cerca”, cuenta Vicelli.

Vicelli cuenta que volvió a Brasil al día siguiente con nuevas órdenes para el equipo en el sitio. “A la vuelta del viaje, incrementamos posiciones en la obra, rápidamente pusimos los primeros pilotes, luego armamos la estructura metálica. Nos ajustamos mucho al cronograma, y eso generó más confianza al señor Ginon en sus visitas periódicas”, afirma el ejecutivo.

Otra providencia de la contratista fue la gestión de proveedores. “En los suministros de los productos más sensibles, como fachadas, elegimos contratar dos proveedores, para mitigar los riesgos de plazo y calidad. Finalmente, en las etapas finales, yo estuve personalmente dentro del sitio mucho tiempo”, dice Vicelli.

De acuerdo con el director comercial y uno de los cuatro socios de la constructora fundada en 1994 y que hoy en día factura cerca de US$133 millones anuales, el cuidado casi personal de los detalles de las obras es una característica empresarial de Fonseca & Mercadante.

“Nosotros administramos simultáneamente entre seis y diez contratos, no más que eso, porque queremos estar cerca el cliente. No existe un contrato en manos de un ejecutivo nuestro que no sea seguido en cada etapa. Nosotros no queremos ser una de las mayores constructoras de Brasil, pero sí nos interesa mucho estar entre las mejores en términos de atención al cliente y realización del servicio”, afirma Vicelli.

La reputación positiva seguramente se relaciona con su contratación por varios grandes clientes comerciales e industriales de Brasil, tales como AmBev, Carrefour, Grupo Pão de Açúcar, IBM, Gerdau, Mercedez Benz y otras.