Tecnológicas y versátiles
02 August 2016
Si bien el mercado latinoamericano de equipos de construcción cayó en los últimos dos años, presionado principalmente por Brasil, el segmento de excavadoras no ha presentado una baja muy acentuada, y este año ha mostrado mayor estabilidad.
Este fenómeno sucede porque se trata de uno de los productos más importantes del mercado de máquinas de construcción en el mundo, ya que es imposible ejecutar una obra sin su uso.
En América Latina no es diferente. En la mayoría de los países de la región ésta fue una de las pocas líneas que se recuperaron e incluso crecieron, respecto al periodo pre-crisis de 2009. En los últimos cinco años el mercado ha demandado más de 30.000 excavadoras, y dentro de ese mercado, su mayor proporción está en la clase de 19 hasta 24 toneladas.
Según comenta Mauricio Briones, especialista de Caterpillar para aplicaciones en excavadoras, aunque en este momento el mercado de construcción e infraestructura esté operando a la baja, ayuda mucho el hecho de que la excavadora sea un equipo tan versátil que puede ser utilizado en un número mayor de aplicaciones que las que normalmente permiten otras máquinas, como por ejemplo cargadoras de ruedas, tractores de orugas y moto-traíllas. “Esto ha sido positivo para los fabricantes tradicionales. El cliente ahora es más criterioso en la compra, pues sabe que no vale la pena optar por una máquina que no va ofrecer el mejor retorno sobre la inversión”, señala.
Nuevas tecnologías
Teniendo en cuenta que especialmente en tiempos de crisis se vuelve aún más importante optar por un equipo más versátil, los fabricantes están ahora muy preocupados en añadir tecnología a sus productos, garantizando que el equipo va a poder operar en diferentes condiciones y exigencias de trabajo.
Luciano Rocha, director de Volvo Construction Equipment Latin America para la región de habla hispana, comenta que la marca ofrece una amplia gama compuesta por excavadoras de orugas, sobre ruedas y compactas, con pesos operacionales entre 14 y 90 toneladas, entre las cuales se destaca la EC220DL, una de las líderes en su clase, gracias al nivel de desarrollo tecnológico incorporado a ese producto.
Con peso operacional de 22,2 toneladas, el equipo posee una lanza de 5,7 metros de largo y un brazo de 2,9 metros, ambos con tecnología heavy duty, lo que, según la compañía, garantiza la confiabilidad y su disponibilidad mecánica. Como la seguridad es la piedra fundamental dentro de Volvo, todas las excavadoras de la marca poseen una cabina ROPS reforzada en su estructura con un elemento esencial que es la chapa perforada superior anti-resbalamiento, además de un sistema eléctrico único con gerenciamiento de niveles, códigos de errores, modo de trabajo, flujo y presión, entregando al operador condiciones generales de monitoreo.
Equipada con un motor Volvo D6, la EC220DL permite el trabajo a bajas revoluciones con la correspondiente reducción en el consumo de combustible.
Por su parte, Case Construction ofrece en América Latina 14 modelos de excavadoras de entre 2 y 80 toneladas de peso operacional, con versiones exclusivas como la Mass Excavator, para excavaciones pesadas.
Un ejemplo es la CX700B de 70 toneladas, que garantiza un bajo consumo de combustible en relación a su tamaño. Equipada con la nueva cabina de la Serie B, que tiene más espacio para el operador y aislamiento de ruido y vibración. Además de eso, el usuario puede elegir entre una variedad de modos de aplicación como el Super Energy, que da prioridad a la velocidad cuando es necesario, y Hard Work que optimiza la productividad y la eficiencia del combustible. La marca garantiza 5.000 horas de trabajo entre mantenciones, bajando sensiblemente las pèrdidas por paros y costos de mantención
La marca también está actualmente desarrollando un nuevo sistema hidráulico que permite disminuir el consumo de combustible en un 14% y aumentar la productividad en un 8%. Según, Carlos Franca, Gerente de Marketing de Case Construction Equipment para América Latina “la mejora continua es muy importante para nosotros en Case”.
Por su parte, SDLG reforzó su línea de excavadoras con el lanzamiento de una nueva máquina de gran tamaño, la LG6300E. Disponible en todo territorio latinoamericano exceptuando Brasil, el nuevo equipo es parte de una estrategia de la marca que pretende aumentar el alcance de su línea de equipos de construcción en la región al ampliar las posibilidades de aplicación y los segmentos de actuación en un único dispositivo.
La LG6300E, de 30 toneladas de peso operacional, fue proyectada para servicios pesados, por eso las partes sujetas a más esfuerzos son producidas en hierro fundido para garantizar su resistencia y una mayor vida útil. Cuenta con un sistema hidráulico que incluye funciones como suma de flujos y regeneración que permiten más eficiencia y rapidez, además, dispone de una tecnología de control electrónico que puede adecuarse a diferentes operaciones con más eficiencia energética. Su chasis más largo también proporciona buena maniobrabilidad y estabilidad.
“América Latina es un mercado importante y que tiene muchas obras en curso, o planificadas que necesitan de un equipamiento de este tamaño”, afirma Babliton Cardoso, director de SDLG Latin América.
Tecnología x Inversión
Otro importante factor a tener en cuenta en la adquisición de una excavadora es el retorno de la inversión. ¿Qué tanta tecnología se debe agregar a un equipo para garantizarla?
Caterpillar desarrolló una nueva línea de excavadoras para atender las necesidades individuales de cada cliente, pensando siempre en un rápido retorno sobre la inversión. La compañía recientemente anunció la nueva 320D2 GC, que según el especialista de la compañía, Mauricio Briones, “será el modelo favorito de la mayoría de los clientes en razón de las ventajas y de los beneficios que ofrece”.
El concepto de maquina GC nació de un estudio de satisfacción de los clientes, el que concluyó que éstos buscan un precio más atractivo, bajo consumo de combustible, alta disponibilidad mecánica y confiabilidad en la operación. Según Briones, la 320D2 GC ofrece todo eso, gracias al hecho de estar equipada con el motor C4.4, con sistema electrónico de inyección que permite un consumo medio de 13 a 15 litros por hora. “Para eso, el sistema de inyección fue totalmente proyectado y desarrollado para el combustible de baja calidad disponible en Latinoamérica”, agrega.
Pensando en innovación y siendo cuidadosamente estratégica, JCB acaba de lanzar en Brasil una serie de tecnologías aplicadas a sus excavadoras. La marca está incorporando sus nuevos motores JCB Dieselmax de 85 HP (aspirado) o 92 HP (turbo) que entregan alto torque y baja rotación, garantizando que el equipo llegue a su máxima fuerza con un bajo consumo de combustible.
Otra característica de la marca es el Livelink, una herramienta de monitoreo remoto, que permite el monitoreo de la operación y el control de las mantenciones preventivas, lo que aumenta la eficiencia operacional de la maquina al disminuir paradas innecesarias.
En tanto, la china Sany anunció recientemente una novedad en sus excavadoras, el nuevo motor Isuzu, con bombas de salida de combustible variables, con capacidad mínima de 242 litros por minuto y un sistema inteligente con diagnóstico de fallas.
Los equipos de la marca desde ahora estarán provistos de un sistema avanzado de flujo hidráulico positivo, el que, según la empresa, ofrece más eficiencia en la operación, agilidad, estabilidad y menores costos de mantención lo que se convierte en mayor retorno de la inversión.
Gradall prueba su tradicionalidad
Gradall Industries, Inc., ha producido en junio su máquina de número 20.000, una Discovery Series D154, equipo que fue especialmente pintado de blanco y azul para “I Make America”, campaña organizada por la Asociación de los Fabricantes de Equipos (AEM, por su sigla en inglés).
Las máquinas de la compañía, que cuentan con un chasis de camión, fueron creadas en 1946 como una solución económica para los gobiernos que necesitaban maquinas multiuso y de bajo costo para reparaciones viales.
Liebherr apuesta por la renovación de equipos
Liebherr presentó durante la feria Bauma 2016, en Múnich, Alemania, una nueva serie de excavadoras sobre orugas, cuyos motores a diésel cumplen las directrices de emisiones Stage IIIA y Tier 3.
Con estreno mundial, el equipo destacado fue la R 922, de 22 toneladas, que posee una lanza monobloc de 5,7 m y un brazo de 2,9 m. Su carro inferior LC tiene un ancho de 2.300 mm. Equipada con motor de 110 kW / 150 HP de potencia, la excavadora fue desarrollada especialmente para trabajar en aplicaciones de movimiento de tierra, como canalizaciones.
La introducción de la R 922 viene acompañada de una renovación de todos los modelos de excavadoras sobre orugas entre 20 t y 25 t, además del próximo lanzamiento de los modelos R 920 y R 924.
Ahorro comprobado
Es durante la operación que se prueba cuánto realmente la máquina puede entregar en términos de rendimiento y economía.
A fines de 2015 la contratista brasileña Hidropav adquirió una excavadora Link-Belt 210X2, la que ha estado operando en las obras del puente Itapaiúna, en São Paulo, como parte del Complejo Chucri Zaidan, que contempla la construcción de un nuevo sistema vial en la capital paulista.
Según Sinésio de Freitas Ferreira, presidente de la compañía, la máquina ha generado ahorros de hasta el 18% en términos de consumo de combustible.