Transformación digital en BIM: ¿cómo apoyan este viaje el intercambio de información y el plan de ejecución?
12 August 2022
Cuando pensamos en la transformación digital tenemos que ir más allá de añadir tecnología a los procesos tradicionales. Tenemos que pensar en hacerlo de otra manera, buscar otras formas de conseguir resultados y destacar. Esta debería ser la mentalidad a la hora de pensar en la implantación de BIM (Building Information Modeling).
El BIM puede definirse como un elemento de apoyo al proceso de gestión de la información. Durante todas las fases del ciclo de vida de la construcción se necesitarán datos para las acciones y decisiones. Proporcionar la información necesaria, a las personas adecuadas y en el momento en que la necesitan es el reto en las definiciones de los procesos de gestión de la información.
La definición anterior parece sencilla, pero es extremadamente compleja, ya que los requisitos se consolidan en un documento llamado EIR (Exchange Information Requirement) y el proceso se detalla en un documento llamado BEP (BIM Execution Plan).
Existen numerosas plantillas de EIR y BEP, que son excelentes para entenderlas. La idea es que nos sirvan de inspiración para desarrollar nuestro propio EIR y BEP. Desgraciadamente, en muchos casos sólo se utilizan de forma automática, es decir, sólo haciendo una copia de dichos modelos. Este es uno de los principales errores que, en consecuencia, nos impide añadir la tan deseada Transformación Digital a BIM.
En resumen, los requisitos de información de estos modelos no reflejan necesariamente las necesidades de su organización y sus activos, y el proceso indicado en los planes de ejecución del modelo a veces no es el más ajustado a la realidad del proyecto aplicado.
La idea de cambiar el proceso, centrarse en la gestión de la información, eliminar los silos y unificarla de la mejor manera posible es la esencia de BIM. En otras palabras, no se cambian los procesos copiando el proceso de otro o intentando hacer lo mismo con la nueva tecnología.
Haciendo una analogía con la Fórmula 1, mientras todos los equipos se centraban en ganar tiempo en las paradas en boxes, Red Bull consiguió ver la solución con otra perspectiva: incluyeron sensores en los coches, hicieron alianzas con empresas de telecomunicaciones para captarlos a lo largo de los circuitos, transmitiéndolos en tiempo real al equipo, que, con la Inteligencia Artificial, empezó a tener insights y a tomar decisiones basadas en datos. Con otra mirada, un equipo novato hizo la Transformación Digital y se convirtió en el gran jugador en pocos años.
El BIM es una oportunidad, un campo aún inexplorado. Tenemos que experimentar, probar, equivocarnos, pivotar y buscar nuestro propio camino de forma que nos diferenciemos.