América Central: En recuperación

La crisis financiera mundial afectó con más fuerza a los países de América Central que a los de Sudamérica y si bien ya se están viendo algunos repuntes en sus índices, aún queda camino por recorrer. De acuerdo con el Índice Mensual de Actividad Económica (Imae) relativo a la construcción del primer trimestre de 2011, Costa Rica, Guatemala y Honduras, aún muestran variaciones interanuales negativas, pero menos acentuadas. Por su parte, El Salvador y Nicaragua muestran mayor dinamismo, reportando incrementos de la actividad por arriba del 5% en el caso del primero, y mayores que el 3% en el caso del segundo.

En términos generales se espera que en 2011 haya una recuperación bastante discreta en el sector y se consolide a partir de 2012 con un mayor dinamismo en su crecimiento. La actividad constructiva está retomando proyectos que, como consecuencia de la crisis, aún no habían madurado, sobre todo en lo que respecta a vivienda. En países en donde los fenómenos naturales hicieron destrozos en la infraestructura vial, por ejemplo Guatemala, aún está pendiente la obtención de recursos para orientarlos a la reconstrucción. Adicionalmente, los inversionistas, como consecuencia de la incertidumbre generada por la crisis, aún están siendo muy reservados, e incluso, muy reticentes a efectuar nuevas inversiones.

Costa Rica

A pesar que Costa Rica mantiene un ritmo creciente mucho más pronunciado que el resto de Centroamérica, el presidente de la Cámara Costarricense de la Construcción, Ricardo Castro, es crítico. "Los índices de la construcción indican que el sector no ha logrado recuperarse de la crisis que le afectó. Se observa que la variación porcentual mensual interanual del Imae en Construcción Total aún se mantiene por debajo de cero; si bien la una variación porcentual interanual del Imae Construcción Privada es positiva, no logra compensar la variación negativa del Imae Construcción Pública, lo que es consecuencia de un Gobierno que no invierte o invierte poco en obras", diagnostica.

Respecto a los permisos de construcción que se tramitan ante el Colegio Federado de Ingenieros y de Arquitectos de Costa Rica (CFIA), para este año se proyecta un alza de 12% respecto de 2010, alcanzando así los 5,7 millones de metros cuadrados, cifra levemente inferior a los 5,9 millones de metros cuadrados tramitados en permisos durante 2006. A pesar de esta positiva estimación, Castro explica que el primer trimestre del 2011 muestra una fuerte desaceleración en la construcción de viviendas, cerca del 20% menos que el año anterior, compensada por el crecimiento en los otros cuatro sectores: industria, comercio, oficinas y "otros". "Esta situación preocupa por cuanto tradicionalmente el sector vivienda representa dos terceras partes del área total que se construye en nuestro país", indica.

En cuanto a empleos directos en el sector construcción, de acuerdo a cifras de la Caja Costarricense de Seguro Social, en julio de 2008 se tenían 90.560, número que a diciembre de 2009 había bajado 40,5%, a 64.436 empleos. Para julio de 2010 se obtuvo un repunte y llegó a 70.317, índice que volvió a caer en diciembre hasta los 67.090 empleos. Si bien para marzo de 2011 se registró un repunte que alcanza los 71.270 empleos directos, sigue estando 21,3% por debajo del peak de 2008.

Dentro de las medidas que se han tomado en el país, Castro destaca una mejoría en las condiciones de crédito de largo plazo para vivienda por parte de los bancos públicos y privados del sistema bancario nacional, aunque esto no ha pasado con las herramientas de corto plazo para financiar los desarrollos. De todo el crédito del sistema nacional, la vivienda pasó de representar el 28,67% en marzo del 2007 al 31% en marzo del 2011.

La segunda medida es la firma de un decreto ejecutivo por parte de la Presidenta Laura Chinchilla, con el que se mejoran los procedimientos y se reducen plazos en el trámite de permisos para construcción a dos meses desde los actuales cinco o seis meses, esto con una consecuente reducción de costos por tiempo, sin eliminar ninguno de los requisitos legales ni técnicos actuales. "Esta mejoría se basa en modificar el procedimiento lineal de institución en institución, a un proceso simultáneo en paralelo entre las diferentes instancias que intervienen en el trámite de permisos", explica el ejecutivo.

"Es muy importante que el Estado inicie las obras que ha programado, para mejorar nuestra infraestructura y así ser más competitivo en un mercado muy necesitado de atraer inversiones, tanto locales como del extranjero, para así generar empleo y mejores condiciones salariales para los trabajadores", señala Castro.

"Tenemos cuatro ejes de trabajo de gran importancia para la sociedad y el país en general", detalla. "En primer lugar está el desarrollo de vivienda y sobre todo para la clase media; luego viene una mejora regulatoria y de trámites; en tercer lugar la construcción de infraestructura para mejorar nuestra competitividad y bajar costos de producción; y finalmente el desarrollo de esquemas de financiamiento que permitan aprovechar los recursos que tenemos en el país", finaliza el dirigente.

Guatemala

Guatemala también ha comenzado el año con mejores indicadores. Según comenta el ex presidente de la Cámara Guatemalteca de la Construcción, Álvaro Mayorga, el Índice Mensual de Actividad de la Construcción (Imacon) muestra una contención en la caída del sector. "En efecto, entre enero y abril del año recién pasado, las caídas reflejaron cifras de dos dígitos, las cuales se registraron consecutivamente, mientras que en el presente cuatrimestre, si bien siguen persistiendo las caídas, estas fueron menores al 4% y en el mes de febrero se presentó una variación interanual positiva", detalla.

En términos anuales, para el sector de la construcción para el presente año se estima una caída del 1,4%, cifra estimada positiva después de haber registrado, en 2009 y 2010, caídas del 10,8 y 11,2%, respectivamente.

Según enumera el ejecutivo, los factores que han incidido negativamente en el sector durante la crisis han sido: reducción del consumo interno, lo cual ha repercutido en los niveles de ventas; restricción de créditos; aumento de la tasa de interés; menos recursos orientados al presupuesto del Ministerio de Infraestructura, Comunicaciones y Vivienda; deuda a los contratistas, que afectó significativamente a los medianos y pequeños empresarios; remesas con menor dinamismo; caída de la inversión Extranjera Directa; y particularmente en 2008, el aumento de la inflación, lo que incidió en la pérdida del poder adquisitivo del mercado objetivo

"Se realizaron y se siguen perfilando una serie de eventos y actividades para el impulso del sector de la construcción que han permitido reactivar el mercado de la vivienda en Guatemala, beneficiando tanto a productores como a demandantes. Adicionalmente se realizaron propuestas para reactivar la economía nacional a través del sector de la construcción, ya que este último es el sector idóneo mediante el cual se puede detonar el crecimiento de la actividad económica", explica Mayorga.

Entre las principales medidas propuestas están:

- Aquellas encaminadas a mejorar la infraestructura del país, dentro de las que resalta el impulso de la legislación de Alianzas para el Desarrollo, que será un punto toral para el mejoramiento de la infraestructura, competitividad y crecimiento del país.

- Las que promueven el establecimiento de una facilidad de liquidez denominada Fondo para Financiamiento de la Vivienda (FOVI) como mecanismo para proveer líneas de crédito para financiamiento de vivienda a contratos de crédito pactados con tasa fija, plazos adecuados y en moneda nacional.

- El establecimiento de un Fondo de Garantía (FOGA) orientado a garantizar las operaciones de compra por parte de las entidades del sistema bancario, de cartera generada por entidades de microfinanzas y cooperativas, con el fin de multiplicar las disponibilidades de financiamiento para el sector vivienda.

- Finalmente, la eliminación del Impuesto al Valor Agregado en la compra de vivienda y crear un impuesto transaccional del 1,5%, para reducir los costos de adquisición de vivienda.

"Propuestas como el FOGA y el FOVI fueron tomadas en cuenta en el Programa Nacional de Emergencia y Recuperación Económica, estando pendientes aún de implementación", señala Mayorga.

En cuanto a los desafíos de mediano y largo plazo para el sector, el ejecutivo señala lo siguiente "la mejora continua de la red vial guatemalteca, y de la infraestructura física en general, con la finalidad de incrementar los niveles de competitividad del país, de tal cuenta que se impacte positivamente en el crecimiento económico del país. Del mismo modo, contribuir a la reducción del déficit habitacional del país, el cual se estima para 2015 en 1,9 millones de unidades. Todo lo anterior, mediante la participación conjunta del Gobierno y sector privado, en el marco de las bondades de la Ley de Alianzas para el Desarrollo de la Infraestructura Económica", agrega.

Nicaragua

Después de casi cinco años de caída en picada, el sector construcción finalmente empezó a crecer en Nicaragua, así al menos lo exhibe el más reciente Índice Mensual de Actividad Económica (IMAE) del Banco Central de ese país. Según el informe, en enero pasado se reportó un crecimiento de la construcción del 3,3% respecto al mismo periodo del año pasado. En enero de 2010, se reportaba una caída de la actividad del 17,4%en comparación a enero de 2009.

Según la Cámara Nicaragüense de la Construcción, esta recuperación se debe principalmente a las inversiones privadas que se registran en el país, así como a la recuperación de la inversión pública y del sector urbanizador.

El Ministerio de Transporte e Infraestructura, el Fondo de Mantenimiento Vial (Fomav), y la Empresa Nacional de Acueductos y Alcantarillados (Enacal) han anunciado inversiones que superarían los US$250 millones para este año. Se estima que Nicaragua desembolsará unos US$450 millones en diversas iniciativas.

A esta cifra se le deben agregar las inversiones que se ejecutarán en proyectos de generación de energía, urbanización y turismo, que agregarían otros US$500 millones a la cartera.

Con estos montos en mente, la Cámara prevé que se sostendrá el crecimiento del sector por al menos dos años, al margen de nuevas inversiones que lleguen.

Las buenas perspectivas se apoyan en otro dato fundamental. Las ventas de cemento han aumentado en el país y se estima que su demanda crecerá en torno a un 10%. Holcim ya ha anunciado inversiones por US$1 millón para hacer frente al incremento.

Honduras

Honduras no se mantuvo al margen de la crisis. El sector de la construcción cerró 2010 con números rojos con una caída de 8,6% respecto a 2009, menor a la reportada en 2008, cuando experimentó un descenso de 21,1%.

Y si bien el país sigue experimentado descensos en sus índices de construcción, mantiene una nutrida carpeta de inversiones que sin duda ayudarán a reactivar al sector de la construcción. En energía el país estima para este año desembolsos por US$1.058 millones, US$297.380 millones en infraestructura, US$176.085 millones en turismo y más de US$1.528 millones en el área forestal.

El Salvador

Si bien hay signos de leves mejoras, el sector de la construcción de El Salvador lleva 18 meses con escaso trabajo, debido a la poca demanda debido a la incertidumbre política y económica.

El director ejecutivo de la Cámara Salvadoreña de la Industria de la Construcción (Casalco), Ismael Nolasco, urgió al Gobierno a agilizar los proyectos de inversión pública pendientes, según indicaron medios locales.

Casalo, espera impulsar el nuevo Sistema Financiero de Fomento para el Desarrollo, para promover proyectos de inversión en el sector de la construcción y darle además especial atención a la micro y pequeña empresa con asistencia técnica.

El nuevo sistema financiero se basa en tres componentes: un aporte de la Banca de Desarrollo de El Salvador, BDES, que podría incrementar sus recursos con préstamos en el exterior para dar apoyo a proyectos estratégicos en el país; el segundo componente se basa en las experiencias de las empresas con las que se le dará apoyo a la micro y pequeña empresa, brindándoles además financiamiento, asistencia técnica y desarrollo a través del Fondo de Desarrollo Económico, FDE, que podría incrementar su patrimonio a US$480 millones; y el tercer componente el Sistema Financiero se apoyaría en el Fondo Salvadoreño de Garantías, para facilitar el acceso a los créditos para las micro, pequeñas y medias empresas para proyectos que no tienen los fondos suficientes para ser ejecutados.